Sobre Demonios, Angeles y Pecadores

por **Jefa Suprema** Miér Sep 09, 2009 9:27 pm

Demonio: Es una criatura del infierno, un alma condenada a la paila por alguna accion en una de sus vidas, por naturaleza es malvada (Por eso esta ahi), aunque hay algunas almas condenadas que simplemente ya no lo son, pero no pueden salir de ahi. Un demonio puede ir a la tierra cuando le es encomendada una mision (Destruir a Alguien, Conseguir el Alma de alguna Persona, entre otras que se trataran luego). Si un demonio se comporta fuera de la ley, este es expulsado del infierno a la tierra, donde vivira varios contratiempos en lo que se proponga hacer (Causados por otros demonios).

Poderes de los Demonios:
Piroquineticos (Controlan el fuego)
Telepatas (Leen la mente)
Poseen fuerza subnormal.
Son increiblemente seductores y hermosos e irresistibles a la vista de los mortales.
No suelen llevarse bien con los Angeles por razones obvias.
Son increiblemente astutos y lujuriosos en su mayoria.

Reglas Basicas de un Demonio:
1. Son criatura en su mayoria despiadadas y son regidos por la lujuria, la avaricia, y la soberbia.
2. Todo demonio posee dos formas, su forma de demonio que no es del todo definida y su forma humana que es la que se le asigna para la mision que se le envia a cumplir en la tierra. Estas misiones les hacen ascender de rango, y asi, aunmentar su poder asi que se debe especificar que rango es tu demonio.
3. Pueden matar, siempre y cuando todos los personajes que esten presentes en ese roleo esten de acuerdo (Es decir, el usuario tras el personaje).
4. SI UN DEMONIO SE ENOJA DE SU FRENTE SALDRAN UNOS CUERNOS! NO HAY EXCEPCION! Mientras mas grande es su rango mas grandes son los cuernos. (No aplica en demonios que hayan renunciado a sus cuernos).
5. Para renunciar a los cuernos:
Cuando un demonio renuncia a sus cuernos, deja de ser, literalmente un demonio, pero conserva sus poderes, tan fuertes segun el rango que posean antes de abandonarlos. Para abandonar los cuernos debes enviar un MP al moderador de los demonios y explicarle los motivos de porque los dejas.

Angeles: Los angeles son criaturas hermosas y bondadosas, no suelen poseer pecado alguno, y si lo poseen... seguramente es en un grado minimo. Son hermosos y muy inteligentes. Son el alma de personas que han sido buenos en vidas y por eso se les asigna alguna labor especial en la tierra como curar a alguien o dar compañia. Si estos se comportan fuera de la ley son expulsados del cielo y condenados a poseer algun pecado, en forma de condena para que se arrepientan.

Poderes de los Angeles:
Telepatas (Leen la mente)
Poderes Curativos.
Voz armoniosa.
Increiblemente hermosos e irradian bondad.
No suelen llevarse bien con los demonios.

Reglas Basicas de los Angeles:
1. Son criaturas hermosas regidas por la bondad y la armonia interna.
2. Un angel que se envia a una mision no tiene un forma fija, toma forma solo ante la persona a la que le fue enviada y sus cercanos y para los demonios. Una vez cumplida la mision, en angel asciende y se gana sus alas y asi sucesivamente distintos rangos.
3. Un angel no puede matar, pero puede castigar a un demonio.
4. Para renunciar a las Alas:
Un angel puede renunciar a sus alas cuando lo desee, solo debe enviar un MP al moderador de los angeles explicando el motivo por el cual desea hacerlo, y puede conservar sus poderes segun sea el rango que posea para ese entonces.

Pecadores:
Los pecadores son humanos que viven esclavos de sus pecados y placeres... Aqui van las definiciones de los 7 pecados capitales, deben elegir uno de ellos y aplicarlo en su personaje.

1. La Lujuria: La lujuria es usualmente considerada, de manera exagerada, como el pecado que incluye pensamientos o deseos obsesivos o excesivos de naturaleza sexual. Siendo que es simplemente pensamientos posesivos sobre la otra persona. Debido a su intrínseca relación con la naturaleza sexual, la lujuria en su máximo grado puede llevar a compulsiones sexuales o sociológicas y/o transgresiones incluyendo entre muchas de ellas a la adicción al sexo, adulterio y violación.

2. La Gula: Actualmente la gula o glotonería se identifica como el consumo excesivo de comida y bebida, aunque en el pasado cualquier forma de exceso podía caer bajo la definición de este pecado. Marcado por el consumo excesivo de manera irracional o innecesaria, la gula también incluye ciertas formas de comportamiento destructivo. De esta manera el abuso de substancias o las borracheras pueden ser vistos como ejemplos de gula.

3. La Avaricia: Como la lujuria y la gula, un pecado de exceso. Sin embargo, la avaricia (vista por la Iglesia) aplica sólo a la adquisición de riquezas en particular. Tomás de Aquino escribió que la avaricia es "un pecado contra Dios, al igual que todos los pecados mortales, en lo que el hombre condena las cosas eternas por las cosas temporales." En el Purgatorio de Dante, los penitentes eran obligados a arrodillarse en una piedra y recitar los ejemplos de avaricia y sus virtudes opuestas. "Avaricia" es un término que describe muchos otros ejemplos de pecados. Estos incluyen deslealtad, traición deliberada, especialmente para el beneficio personal, como en el caso de dejarse sobornar. Búsqueda y acumulación de objetos, robo y asalto, especialmente con violencia, los engaños o la manipulación de la autoridad son todas acciones que pueden ser inspirados por la avaricia. Tales actos pueden incluir Simonía.

4. La Pereza: es el más “metafísico” de los Pecados Capitales en cuanto está referido a la incapacidad de aceptar y hacerse cargo de la existencia en cuanto tal. Es también el que más problemas causa en su denominación. La simple “pereza”, más aún el “ocio”, no parecen constituir una falta. Hemos preferido, por esto, el concepto de “acidia” o “acedía”. Tomado en sentido propio es una “tristeza de ánimo” que nos aparta de las obligaciones espirituales o divinas, a causa de los obstáculos y dificultades que en ellas se encuentran. Bajo el nombre de cosas espirituales y divinas se entiende todo lo que Dios nos prescribe para la consecución de la eterna salud (la salvación), como la práctica de las virtudes cristianas, la observación de los preceptos divinos, de los deberes de cada uno, los ejercicios de piedad y de religión.

5. La Ira: Puede ser descrita como un sentimiento no ordenado, ni controlado, de odio y enojo. Estos sentimientos se pueden manifestar como una negación vehemente de la verdad, tanto hacia los demás y hacía uno mismo, impaciencia con los procedimientos de la ley y el deseo de venganza fuera del trabajo del sistema judicial (llevando a hacer justicia por sus propias manos), fanatismo en creencias políticas y generalmente deseando hacer mal a otros. Una definición moderna también incluiría odio e intolerancia hacia otros por razones como raza o religión, llevando a la discriminación. Las transgresiones derivadas de la ira están entre las más serias, incluyendo homicidio, asalto, discriminación y en casos extremos, genocidio.

6. La Envidia: se caracteriza por un deseo insaciable, sin embargo, difieren por dos grandes razones: Primero, la avaricia está más asociada con bienes materiales, mientras que la envidia puede ser más general; segundo, aquellos que cometen el pecado de la envidia desean algo que alguien más tiene, y que perciben que a ellos les hace falta.

7. La Soberbia: En casi todas las listas de pecados, la soberbia es considerado el original y más serio de los pecados capitales, y de hecho, es también la principal fuente de la que derivan los otros. Es identificado como un deseo por ser más importante o atractivo que los demás, fallando en halagar a los otros.

Según la Biblia, este pecado es cometido por Lucifer al querer ser igual que Dios.

Genéricamente se define como la sobrevaloración del Yo respecto de otros por superar, alcanzar o superponerse a un obstáculo, situación o bien en alcanzar un status elevado y subvalorizar al contexto. También se puede definir la soberbia como la creencia de que todo lo que uno hace o dice es superior, y que se es capaz de superar todo lo que digan o hagan los demás. También se puede tomar la soberbia en cosas vanas y vacías (vanidad) y en la opinión de uno mismo exaltada a un nivel crítico y desmesurado (prepotencia).